Todo tiene un principio y todo tiene un final.
Y es cada vez que comenzamos algo nuevo cuando nuestro marcador está a cero, esperando oportunidades que lo hagan correr lo más rápido que pueda, alcanzando metas imposibles, cumpliendo sueños improbables...
Cada principio tiene su inicio en un final. Se cierran capítulos y se abren otros para crear nuevas historias. Volvemos a tener el camino libre para corregir nuestros errores y aprender de ellos. Si puedes soñarlo, puedes hacerlo.
Así que... Érase una vez un nuevo comienzo.
Y es cada vez que comenzamos algo nuevo cuando nuestro marcador está a cero, esperando oportunidades que lo hagan correr lo más rápido que pueda, alcanzando metas imposibles, cumpliendo sueños improbables...
Cada principio tiene su inicio en un final. Se cierran capítulos y se abren otros para crear nuevas historias. Volvemos a tener el camino libre para corregir nuestros errores y aprender de ellos. Si puedes soñarlo, puedes hacerlo.
Así que... Érase una vez un nuevo comienzo.